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miércoles, 20 de noviembre de 2019

Minecraft, para padres y para niños

Llevo tiempo pensando el enfoque que darle al blog. Voy a trompicones con él y realmente no tengo claro hacia dónde dirigirlo. Tengo claro que quiero utilizarlo como diario de las andanzas de mis hijos, pero a la vez creo que tienen más potencial que eso. Así que he decidido también utilizarlo
como guía para padres a los que no les atraen demasiado los videojuegos pero que sus hijos están empezando a jugar a la consola. Obviamente no todos los juegos que hay son adecuados para todas las edades. Aquí pasa como con las películas, dependiendo del contenido hay un órgano regulador que asigna una edad, una organización que se llama PEGI. De esto hablaré en otro momento.

Seguro que has oido hablar de Minecraft (se pronuncia maincraft). Es un juego de construcción a base de bloques en el cual LITERALMENTE puedes hacer cualquier cosa, puedes construir, destruir, comer, luchar, cazar, viajar, recolectar o simplemente vivir una vida. Tiene un ciclo de día/noche y diferentes entornos naturales como islas, selva, tundra, paisajes nevados, costas, a los que se llama "biomas".

Tiene la característica que está todo formado con bloques, incluso nuestro personaje y los enemigos, lo que le da un aspecto simplón y antiguo, pero en realidad es un juego muy profundo. Al tener ese aspecto es ideal para niños y pueden jugar sin que los padres tengan miedo a que salga algo inapropiado.

Mis hijos empezaron a jugar a él hace casi dos años sin apenas leer, pero su interfaz (menús) bastante intuitiva les permitía hacer casi todo lo que el juego tiene que ofrecer.

Aqui podéis ver de qué va el juego con un gameplay de Elías y Eloy:






Como podéis ver su aspecto cuadriculado es inocente, pero tiene muchas opciones de construcción, de montaje de armas, de vestuario…

El juego tiene 3 modos principales: Supervivencia, Creativo y Aventura:

Supervivencia: En este modo el jugador debe sobrevivir a los enemigos que lo rodean. Empieza solo armado con un pico y debe buscar materiales para construir un refugio en el que guarecerse por la noche, que es cuando salen los “creepers”, los enemigos básicos del juego. Así mismo debemos buscar comida, ya sea plantas o carne cazando animales. A pesar de su aspecto simple es todo bastante realista: para conseguir madera debemos talar árboles, para cocinar antes debemos encender una hoguera…

Creativo: Es el modo favorito de mis hijos. Aquí tienes recursos y herramientas ilimitados para construir todo lo que se te ocurra, por lo que como dice el nombre del modo la creatividad es lo que define los límites de este modo. Hay gente que hace verdaderas obras de arte, recreando ciudades reales o de películas.

Aventura: Este modo lo  utilizan los usuarios para crear mapas o biomas que comparten con otros jugadores. Además de crear el mapa con su orografía y clima, también establecen las reglas que lo controlarán: qué se puede romper y qué no, si los animales se pueden cazar, qué materiales pueden usarse para construir, etc.


Como puede verse a pesar de su simpleza gráfica este juego es toda una joya, y siempre lo recomiendo para niños porque realmente ayuda a desarrollar la creatividad en los más pequeños.