Llevo tiempo pensando el enfoque que darle al blog. Voy a
trompicones con él y realmente no tengo claro hacia dónde dirigirlo. Tengo
claro que quiero utilizarlo como diario de las andanzas de mis hijos, pero a la
vez creo que tienen más potencial que eso. Así que he decidido también
utilizarlo
como guía para padres a los que
no les atraen demasiado los videojuegos pero que sus hijos están empezando a
jugar a la consola. Obviamente no todos los juegos que hay son adecuados para
todas las edades. Aquí pasa como con las películas, dependiendo del contenido
hay un órgano regulador que asigna una edad, una organización que se llama PEGI. De
esto hablaré en otro momento.
Seguro que has oido hablar de
Minecraft (se pronuncia maincraft). Es un juego de construcción a base de
bloques en el cual LITERALMENTE puedes hacer cualquier cosa, puedes construir,
destruir, comer, luchar, cazar, viajar, recolectar o simplemente vivir una
vida. Tiene un ciclo de día/noche y diferentes entornos naturales como islas,
selva, tundra, paisajes nevados, costas, a los que se llama "biomas".
Tiene la característica que
está todo formado con bloques, incluso nuestro personaje y los enemigos, lo que
le da un aspecto simplón y antiguo, pero en realidad es un juego muy profundo.
Al tener ese aspecto es ideal para niños y pueden jugar sin que los padres
tengan miedo a que salga algo inapropiado.
Mis hijos empezaron a jugar a
él hace casi dos años sin apenas leer, pero su interfaz (menús) bastante intuitiva
les permitía hacer casi todo lo que el juego tiene que ofrecer.
Aqui podéis ver de qué va el
juego con un gameplay de Elías y Eloy:
Como podéis ver su aspecto cuadriculado es inocente, pero tiene muchas
opciones de construcción, de montaje de armas, de vestuario…
El juego tiene 3 modos principales: Supervivencia, Creativo y Aventura:
Supervivencia: En
este modo el jugador debe sobrevivir a los enemigos que lo rodean. Empieza solo
armado con un pico y debe buscar materiales para construir un refugio en el que
guarecerse por la noche, que es cuando salen los “creepers”, los enemigos básicos
del juego. Así mismo debemos buscar comida, ya sea plantas o carne cazando animales.
A pesar de su aspecto simple es todo bastante realista: para conseguir madera
debemos talar árboles, para cocinar antes debemos encender una hoguera…
Creativo:
Es el modo favorito de mis hijos. Aquí tienes recursos y herramientas ilimitados
para construir todo lo que se te ocurra, por lo que como dice el nombre del modo
la creatividad es lo que define los límites de este modo. Hay gente que hace verdaderas
obras de arte, recreando ciudades reales o de películas.
Aventura:
Este modo lo utilizan los usuarios para
crear mapas o biomas que comparten con otros jugadores. Además de crear el mapa
con su orografía y clima, también establecen las reglas que lo controlarán: qué
se puede romper y qué no, si los animales se pueden cazar, qué materiales
pueden usarse para construir, etc.
Como puede verse a pesar de su simpleza gráfica este
juego es toda una joya, y siempre lo recomiendo para niños porque realmente
ayuda a desarrollar la creatividad en los más pequeños.